Custodios del Tridente: Los "Theremitas"

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LOS "THEREMITAS"

Los Custodios del Tridente son llamados "Theremitas" por la población de Nusci, planeta natal de este capítulo de Marines Espaciales. Este término no es aceptado por los astartes pues entronca con una tradición supersticiosa que roza lo herético en el peor de los casos.

Sin embargo, para los nuscitas, esa denominación es un símbolo de respeto hacia los Custodios del Tridente.

TIEMPOS ACIAGOS

La Tríada, un sistema planetario situado en la frontera imperial, había pasado por su período de colonización con bastante lentitud. Una vez logrado el asentamiento de varias poblaciones en los tres planetas habitables del sistema, se pasó a tratar de estabilizar el crecimiento demográfico y erradicar los peligros que poblaban cada mundo. El esfuerzo fue inmenso, y los resultados no fueron nunca los esperados. A pesar de todo, la sociedad mantuvo su tenacidad gracias al apoyo de la maquinaria militar imperial.

Sin embargo, en un universo de guerra constante, el esfuerzo bélico no podía permanecer por tanto tiempo en un solo punto. Por lo que, cuando las fuerzas militares fueron necesarias en otro lugar la población de La Tríada se vio abandonada a su suerte.

Fueron tiempos oscuros y la poca información que ha quedado de aquella época hoy día hace referencia al regreso de la civilización a una etapa tribal, en un intento por mantenerse con vida frente al renacimiento de las razas xenos habitantes de los planetas, la mayoría de los casos con un aspecto monstruoso y aterrador.

Cuando el Imperio volvió de nuevo su atención a La Tríada tuvo que realizar un esfuerzo muy superior al de la colonización para reconquistar el sistema. La llamada Primera Reconquista se saldó con una gran cantidad de vidas humanas, pero finalmente volvió a convertirse en una región imperial.

Una vez más la población se estabilizó pero las razas xenos nativas se habían hecho fuertes y el Imperio, en un intento por destruirlas, o al menos hacerlas regresar a lo más recóndito de cada planeta, creó para el sistema un Astra Militarum numerosa, e incluso un capítulo de Marines Espaciales estableció en La Tríada su base.

Sin embargo, de nuevo el Imperio hubo de ocuparse de otros asuntos y durante mucho tiempo no volvió a fijar su atención en aquel sistema fronterizo. Grave error, la historia volvió a repetirse. Cuando investigadores imperiales visitaron La Tríada tras aquel largo período temporal se encontraron nuevamente una sociedad desarticulada, formada por tribus, y que luchaba desesperadamente por sobrevivir frente a los agresivos nativos.

La Segunda Reconquista volvió a costar muchas vidas, y un esfuerzo demasiado grande para el Imperio como para no tratar de hacer esta vez sí, las cosas como debían hacerse. Se volvió a crear un Astra Militarum y un nuevo capítulo de Marines Espaciales se asentó en La Tríada, pues todo lo anterior había desaparecido sin dejar rastro. Así llegaron los Custodios del Tridente.

THEREM

Muchos estudiosos creen que las dos etapas tribales que sufrieron las sociedades de La Tríada fueron un caldo de cultivo para las supersticiones, los mitos y las leyendas. Las gentes, desencantadas con un Imperio que les había dado la espalda no una sino dos veces, buscaron apoyo en cualquier cosa que pudiera darles cierta fe. Como es lógico, la Inquisición Imperial trabajó con dureza tras la Segunda Reconquista para estirpar estas creencias heréticas, pero la historia, la tradición, las leyendas que pasan de padres a hijos, es muy difícil de erradicar.

En Nusci, un planeta ligado por completo a la tierra, por cuanto la vida solo florece en la subsuperficie y bajo tierra, las leyendas sobre criaturas de las profundidades aún tienen mucho peso, si bien se han alejado de la fe y se han acercado al área de lo irreal, lo soñado.

--Representación pictórica del "Therem"--

El "Therem", según creencias muy antiguas en Nusci, es un espíritu de la Naturaleza que habita en áreas profundas bajo tierra. No es seguro cuándo debió comenzar la leyenda de este ser, sobre todo por la turbulenta situación del Sistema La Tríada hasta la Segunda Reconquista, sin embargo, poco ha variado en varios siglos.

Según se cuenta, un ser de piel blanquecina y anchos hombros vaga sin rumbo en la oscuridad del subsuelo. Siempre que se le ha visto ha sido en momentos en los que los hombres están en peligro, bien perdidos o bien mientras están siendo atacados por las criaturas letales nuscitas. El Therem entonces se convierte en un aliado que guía al desorientado y defiende al necesitado frente a los monstruos de la oscuridad.

Los Custodios del Tridente tienen sus propias tradiciones subterráneas por cuanto gran parte de sus entrenamientos se realizan en el subsuelo y en los túneles, grutas y cuevas de todo Nusci. De este modo, desde casi sus comienzos, no era difícil que los nuscitas se topasen con estos astartes bajo tierra, y, muchas veces, en momentos en los que se hallaban en peligro y los Tridentes los salvaban. Fue así, de manera natural, que los habitantes de Nusci no tardaron en equiparar al espíritu de sus leyendas más antiguas, el "Therem", con los Custodios del Tridente, pasando a denominar a estos astartes como "theremitas".

DE LA SUPERSTICIÓN A LA HEREJÍA

Aunque la presencia de los Tridentes es bien conocida en su mundo natal, no es tan sencillo que las gentes los vean, sobre todo en los primeros tiempos, a no ser en los puntos más poblados y "avanzados". Por tanto, los encuentros subterráneos solían ocurrir entre los Tridentes y gentes que no solo no los habían visto en su vida, sino que ni siquiera sabían lo que era un astartes. De ese modo, durante mucho tiempo, abundaron grupos de personas que estaban convencidas de haberse topado con el "Therem" reencarnado en hombres, aunque hombres increíblemente altos, fuertes y poderosos; además, los relatos posteriores de dichos encuentros tendían a ser exagerados e irreales. Como resultado llegaron a fundarse religiones basadas en estas creencias, que fueron tachadas de heréticas y perseguidas. Fueron momentos de gran tristeza para los Custodios del Tridente, pues "por su culpa", se estaban perdiendo vidas.

Finalmente, erradicadas de manera oficial esas religiones, a las generaciones posteriores de los nuscitas solo les llegaron cuentos y mitos al respecto. Hoy día utilizan el término "theremita" como una denominación tradicional y respetuosa, alejada de las ideas religiosas pretéritas, si bien no está bien visto o aceptado en los círculos oficiales o gubernamentales y, mucho menos, lo aceptan los Custodios del Tridente, preocupados por que vuelva a degenerar en una herética idolatría.

(La imagen de esta entrada es una alteración de una imagen original obtenida en mitosleyendas.com)